Una limpieza diaria, suave, y un buen cuidado hidratante son algunos de los pasos que ayudarán a mantener tu piel sana y reconfortante.
Los productos para el cuidado de la piel de calidad, elegidos para adaptarse al tipo de piel específico y al problema de la piel detectado, pueden proteger la piel de frente a influencias externas agresivas como el sol, cambios climáticos, y la contaminación atmosférica. Procura que tu rutina diaria de cuidado se base en 4 pasos principales, ¿Estás lista?
Limpiar
Una limpieza cuidadosa es el primer paso para el cuidado de tu piel. La limpieza elimina la suciedad, el sudor y el maquillaje. Preparando tu piel para el cuidado, una piel limpia tiene mayor capacidad de absorción a los componentes activos que estás a punto de aplicar
Tonificar
Tonificar la piel hace que la limpieza facial sea más profunda, refresca la piel y restablece tu pH natural, eliminando al mismo tiempo lo que el jabón no pudo y con ello despejando los poros.
Hidratar
Es importante hidratar tu piel del rostro para eliminar la retención de líquidos que se acumula y sobre todo para dar un brillo natural y espontáneo a tu cutis.
Proteger
La protección solar es importante en aquellos días en los que tu piel queda expuesta. Asegúrate siempre de usar protector solar, pases o no tiempo al aire libre.
¿No sabes que productos usar para el cuidado de tu piel?
¡Que no cunda el pánico! Para eso nos tienes, queremos cuidar de tu piel y asesorarte en cada paso que des para que puedas lucir una piel radiante. ¿Ya probaste Biosoma?